POR CRISIS FINANCIERA, PEMEX AHOGA A SUS PROVEEDORES
Por Luis Martínez Alcántara
CIUDAD DE MÉXICO.- La falta de pagos por parte de Petróleos Mexicanos (Pemex) generó un severo impacto en la operación y estabilidad financiera de sus proveedores. Rafael Espino de la Peña, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Petroleros (AMESPAC), advirtió que las afectaciones ya se sienten en servicios básicos, como el transporte de trabajadores hacia las plataformas petroleras. “Ya no tienen dinero ni para el diésel”, señaló, destacando la reducción de operaciones en áreas clave como la flota de embarcaciones que trasladan al personal.
La Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) solicitó en repetidas ocasiones que Pemex regularice sus pagos para evitar un colapso en el sector. Desde principios de año, la crisis económica de los proveedores ha sido evidente, especialmente entre empresas navieras. Por su parte, la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) en Tabasco alertó que el cambio de administración federal podría empeorar la situación, dificultando aún más la estabilidad del sector.
Aunque el gobierno implementó medidas como la reducción del Derecho de Utilidad Compartida, rebautizado como “Derecho al Bienestar”, estas acciones han sido insuficientes para aliviar las presiones financieras de la empresa estatal. Espino subrayó que el gasto gubernamental no parece estar priorizando la solución de este problema estructural.
Restablecer la relación financiera entre el gobierno, Pemex y las empresas del sector energético es esencial para alcanzar los objetivos del Plan Nacional de Energía, que proyecta una producción de 1.8 millones de barriles diarios. Sin embargo, las dificultades de liquidez han puesto en jaque las cadenas de suministro, generando incertidumbre sobre el cumplimiento de estas metas.
“Es imposible que cualquier negocio subsista si no recibe el pago de sus ventas anuales”, advirtió Espino, quien instó a Pemex a tomar medidas inmediatas. De no hacerlo, diciembre podría traer una crisis aún mayor, con proveedores al borde del colapso financiero en uno de los periodos más críticos del año.